sábado, 3 de septiembre de 2011

Diez grados cabezabajo


...hacía días que esto se veía venir...

    Por fin se fue, nos quedamos solos, pensé, e inmediatamente mi mirada fue a parar a aquella esquina de la cama donde te acurrucabas leyendo distraída algún insignificante panfleto.

...cada vez suena mas...

    La seducción fue fácil, tiempos de calor y poca tela que los cubra, basta una mirada furtiva, de reojo, bajando a la cintura y todo está que arde.

...cada vez se mueve más...

    Ahí estábamos, dos cuerpos entregados sin mente a la que hacer caso, esa se olvidó de pensar hace rato, componiendo la improvisada melodía más dulce y bestial con un somier sin parar de danzar sobre él.

...plínnn...

    Una caída veloz, un estruendo al aterrizar, una mirada cómplice, carcajadas. Al término algo que los tape y a buscar otro cobijo, ahí ya no se puede dormir.


No hay comentarios:

Publicar un comentario